El JetSurf revoluciona los deportes acuáticos
El JetSurf es un innovador producto de la firma Motosurf Nation que llegó para revolucionar el mundo de los deportes acuáticos. Es una combinación entre una tabla de surf y una moto acuática, con un motor a chorro fluvial y de menor tamaño.
El motor de la tabla JetSurf es parecido al de los tradicionales “wave runners”, populares en diferentes ciudades como Miami o Cancún. Sin embargo, este posee la singularidad de ser más pequeño, con un peso promedio a los 18 kilogramos, proporcionándole un mejor rendimiento sobre el agua.
Esta nueva tendencia mundial cuenta con diversas configuraciones que la hacen útil tanto para principiantes como por expertos en este deporte. Su motor de dos tiempos de 100 centímetros cúbicos le proporciona una velocidad máxima de casi 60 km/h.
Además, permite realizar acrobacias aéreas igual que en el Kitesurf, pero con una demanda energética mucho menor para el surfing.
Estas tablas pueden ser usadas en la mayoría de las playas o lagos del mundo, debido a que están elaboradas en fibra de carbono y diseñadas con tecnología similares a las máximas categorías de Fórmula 1 y MotoGP.
Philipp Wolf, el vocero de la compañía y también presidente de la Federación Internacional de Surf Motorise, (FIDSM), explicó que la JetSurf elimina todo lo complicado del surf y permite montar las olas sin tener que impulsarse con el cuerpo y la tabla, por obvios motivos, esta no se puede usar las competencias tradicionales del surf.
Sin embargo, la Federación ha venido organizando con la Copa Mundial de MotosurfGP desde el año 2013 en países como Croacia, México y Eslovaquia, donde han aparecido verdaderas figuras en esta disciplina.
Un invento práctico, pero no apto para todos
A pesar de que se podría decir que esta tabla tiene un diseño con características bastante dinámicas, al igual que en otros deportes acuáticos, las piernas de la persona que la monta deben soportar todo el peso del cuerpo.
El hecho de que pueda alcanzar una velocidad tan importante en condiciones extremas ya sea volando por los aires incluso con presencia de fuertes olas, esta actividad se convierte en una disciplina que no es recomendable para las personas que no están en buenas condiciones físicas.
Sin embargo, el potencial de este producto puede ser aprovechado de igual manera con fines recreativos en aguas tranquilas de ríos y lagos, con el simple objetivo de recorrer grandes distancias, igual que con una moto de agua.